La pérdida auditiva significa que usted ha perdido la capacidad de escuchar ciertos sonidos. Tal vez ya no pueda oír tonos agudos, como las voces de mujeres o niños. O tal vez no pueda elegir una sola voz si hay mucha conversación en segundo plano.
A veces la pérdida auditiva es temporal, como un zumbido en los oídos después de un concierto ruidoso. La mayoría de las veces es permanente porque los mecanismos que le ayudan a oír han sido dañados.